Me pertenezco a mi misma en cada letra que sale de mi boca, te pertenezco en cada aliento que sale tu boca, somos pero no nos debemos nada más que el derecho de ser lo que queramos ser. Te quiero tanto que ya se que puedes leer mi mente, eres mi perrito y mi confidente, también el chico que me moja el corazón, con tantas risas me desnudaste el sentimiento y apresuraste la intención de mañana ser mejor que hoy, buena vida, que plenitud siente mi cerebro cuando puedo explicar lo que cada partícula de mi dice y puede comunicar lo que en realidad menos sé.